28/12/08

Hibernum



La avenida despierta sombría, su cauce metálico, de cemento, de ríos sonoros rompiendo el espacio del silencio. Las aves dormitan en las nubes.

A un lado… mil escobas, sucias, inmóviles, el aire abriendo los pulmones, azotando las pieles consagradas al placer, mitigando el fuego con caricias propias de los ángeles sin sexo. Envidiosos y hacendosos.

Al otro… los susurros de los colores, las fragancias densas en ubres de cristal, tomando cuerpo, llenándose lentamente, a la espera del beso inocente y virginal de las almas. Pasionales y mágicos.

En definitiva, el día… de Invierno.

2 comentarios:

M.M.S dijo...

Y que las almas blancas en sus ubres, cristalinas y frias, se derritan con el sol de la mañana, del invierno gélido, de corazones helados deseando ser derretidos...que la belleza de la nieve de su alma invada todos los corazones solitarios, mi bella reina.
Dulce, muy dulce, como tú envuelta en chocolate caliente

Liška dijo...

Que bello despertar imágenes, crear belleza y verla estallar al aire en mil gotitas de semilla.

Envuelta en chocolate caliente? :S... Besos dulces para ti mi Luna, muy dulces.