25/11/08

El grito de María

Antonio no deja de observarla atento. Su sirena hoy lleva puesto un chandal y una cazadora, ajustados, dejando entrever sus curvas femeninas. En sus manos los libros de un idioma que da comienzo al tiempo que su menopausia, camina a su lado sonriente desde hace más de 30 años… le sobran pensamientos para mirarme y decirme: -… acompañando a esta peazo mujer. Esta vida no será suficiente para disfrutarla.

Gustavo sonríe, achuchable, me dice: … soy achuchable y grande. Ella ha escogido el camino de las estrellas; yo sustento sus pies y acaricio sus cabellos. Los días son duros y el tiempo escaso, necesita un descanso que a día de hoy no puede tener, en mi mano está cuidar de esos ratitos que pasamos juntos.

Él hoy despierta, el tiempo no es escusa, siente en la mujer y… se duele…





Porque nos afecta a todos.

3 comentarios:

M.M.S dijo...

Porque todas tengamos unas manos candorosas que acaricien los pies cansados de nuestro caminar, porque todas pisemos en suelo firme y no nos pisen. Para todas, porque todas somos Maria.

Liška dijo...

Por una igualdad que nos permita disfrutar con naturalidad del respeto y el amor a la vida.

Todos somos María.

Mil besos mi bella Dama

Moni dijo...

Pufff,
merecemos nuestro respeto,que no nos pisen ni nos hagan sentir mal. Este mañana hice unos talleres sobre prevención de violencia de género en un instituto y traigo un muy buen sabor de boca, encontré adolescentes, tanto ellas como ellos, muy concienciad@s, muy atent@s y, como mujer maltratada que fui, cuento mi experiencia y veo respeto y éso, me hace sentir muy bien, besines, muackiss