19/1/09

Raíces




El recelo y la furia sujetan las crines,
el miedo y el arrepentimiento siempre cabalgan sin rumbo,
despedazándolo todo a su paso.

El ave de alas rojas que forjó sus propios grilletes,
sujetándolos
a los cimientos del templo del silencio,
grita,

el grifo
grita desde el alma ,
porque el que se extirpó su propia garganta aprendió
que los sonidos del alma vagarán buscando su destino
si es necesario

por toda la eternidad.

2 comentarios:

Moni dijo...

Pufff, qué de cosas dices en tan pocas palabras :)

Liška dijo...

;-) un besazo cielo, un bonito despertar